La poesía es un arma que se dispara sola como el amor de un loco

Contribuyentes

lunes, 18 de enero de 2010

De repente se hizo la noche…






De repente se hizo la noche…


Casi todo lo que has de traer no tendrá valor en este juego de pérdidas, incluso tus cartas marcadas no sirven mucho en este viejo tapete de tahúres. Siempre pensé que no hay derrotas dulces, pero es hermoso atravesar la noche con el único sentido de resucitar al otro lado del mundo, cruzar el bosque, los puentes, deshacerse de los miedos y de las trampas y alzarse sobre lo que te ha de valer de aquí en adelante: tu propia identidad.





F


6 comentarios:

maria varu dijo...

... esa carta nunca deberíamos perderla... besos

MiLaGroS dijo...

La propia identidad que nos diferencie y que nos ayude a ser nosotros mismos. Muy bello y profundo. un abrazo

Le Fay ʚïɞ dijo...

Una identidad q hay q abrazar con fuerza para q no la robe nadie!!

Un beso :)

gaia56 dijo...

No perder la propia identida y defenderla con dignidad en el tránsito.
Un beso

irene dijo...

Todas las noches nos pueden llevar al otro lado del mundo cuando amanece. Hay identidades muy arraigadas, imposibles de perder.
Besos.

Laura Gómez Recas dijo...

¡Qué bien hilado! Es maravillosa la primera frase. Y más, si cabe, la conclusión. Puede que acabes derrotado, pero será dulce la derrota si te encuentras a ti mismo.
¡Genial!
Laura

Programa Electroletras

Con versos en la noche

Mi lista de blogs

Seguidores

Vídeos de poesía para perdidos

Ahora en youtube

Los poemarios

Los poemarios
© (Copyright) Fernando Sarría de todos los contenidos originales de este blog, excepto cuando se señale otro autor.

Archivo del blog