Cuando ya no nos queda nada
el vacío de no quedar
podría ser al cabo inútil y perfecto.
J. Á. Valente
Recuerdo esta estancia de mi cuerpo,
la hondura sin lumbre,
el templo, su silencio,
una argolla dormida entre las manos,
la urgencia en las luces de la tarde,
las nubes fuera, oscuras, esperándome.
el vacío de no quedar
podría ser al cabo inútil y perfecto.
J. Á. Valente
Recuerdo esta estancia de mi cuerpo,
la hondura sin lumbre,
el templo, su silencio,
una argolla dormida entre las manos,
la urgencia en las luces de la tarde,
las nubes fuera, oscuras, esperándome.
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7 comentarios:
"Cuando ya no nos queda nada
el vacío de no quedar
podría ser al cabo inútil y perfecto"
Y a dónde van a parar los recuerdos?
En qué vacío se quedan escondidos?
Besos.
Aquellos tiempos pasados que construyen en nuestro recuerdo un cielo sin límites.
Y este aire inmisericorde, empeñado en terminar de llevarse todo....hasta los recuerdos
Es precioso y tenebroso. Me ha encantado.
Y tener que salir a ellas. La foto perfecta. Besos
Alba
Recuerdos amables o tristes.
No sé qué haríamos sin ellos.
Abrazos.
Todo el vacío de Valente condensado sobre esa silla frente a la ventana.
Y en la puerta de este autorretrato, tu poema.
Un beso.
Laura
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