La poesía es un arma que se dispara sola como el amor de un loco

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miércoles, 4 de junio de 2008

Un hombre...








Un hombre es un libro casi siempre leído,
un animal con sus cinco sentidos.



Una huella de la noche puede ser una sombra,
a veces roja y enigmática que respira en un pecho,
sangre de vida o herida fiel de una ausencia.
Un muelle trae siempre un recuerdo leve,
el agraz viento oscuro que te arrebato la dicha.
Una estación es una rueda de paso,
temible por su ceguera, el banco de madera pulido,
o el rincón más hermoso para una despedida.
No dejamos de ser una mirada, un instante impreciso,
el amor húmedo que trasmite el horizonte,
tal vez el valor de un silencio que exprime las horas
y hace de un océano un nuevo surco en el alma,
azul y definido donde sólo se oyen las gaviotas.
En el bosque no hay calles, ni los surcos son de agua.
Un animal salvaje sabe de ti y olfatea tu piel,
cercándote, como si supiera que en la noche
has de amarlo cuando te devore.




F

16 comentarios:

Waiting for Godot dijo...

"Un animal salvaje sabe de ti y olfatea tu piel,
cercándote, como si supiera que en la noche
has de amarlo cuando te devore"


ME LO QUEDO! :)

Camille Stein dijo...

'No dejamos de ser una mirada, un instante impreciso,
el amor húmedo que trasmite el horizonte... '

... para mí estas palabras

de huellas imprecisas se cubre este fango para el resto de mis madrugadas...

maria varu dijo...

Un hombre puede ser como una "sombra", como un "muelle", como una "estación"... aspectos externos, comunes, plurales. Lo más bello, lo más verdadero es cuando un hombre es una "mirada", un "instante", un "amor" e incluso un "silencio" porque todas esas expresiones salen de ese SER hombre, expresando su singularidad y su peculiaridad, que le distingue.

Besos.

Ego dijo...

¿Desde cuándo no hay calles en el bosque? ¿Desde cuándo resulta romántico pasar por la puerta de un chino? ¿De otro chino? ¿Y los contenedores de basura? ¿Y qué hago con el surco del alma? ¿Desde cuándo no se puede presumir de fidelidad?
Desde hace 48 horas.
Un (b)eso...

Borrasca dijo...

Me dejo acorralar por el animal salvaje que me devora cada noche y al que podría amar fácilmente.

Besos borrascosos

ybris dijo...

Cualquier detalle es un hallazgo para quien sabe mirar.
Hacemos ciertos y definidos los instantes sin gloria por los que pasamos.

Abrazos.

Arkantis dijo...

Nos domina el animal que llevamos dentro..nos atrapa..
Besitos salvajes

CARINA dijo...

hola..
te leo siempre y me sigue gustando hacerlo..
no hago comentarios porque despues de tus escritos poco mas me queda por decir...
un besote

María Jesús Siva dijo...

La noche, las sombras, la ausencia, el horizonte, el silencio... nos vamos convirtiendo en lo que andammos soñando.
El bosque tiene una calle, que sólo yo veo, me lleva allí donde está la noche con sus sombras y ausencias, donde el silencio espera ser devorado mientras grita al horizonte, que desaparece.
Besos.

Lunarroja dijo...

Yo me dejo devorar por ese hombre...

TrasTera dijo...

Una huella, un muelle, una estación... pasos sobre pasos, abrazos sobre despedidas. El bosque quizá no ofrece escondites y el silencio permita esuchar ese aliento que acecha. El final es para enmarcar.

Un besico!!

GlamToday VideoTop dijo...

QUE BONITO ¡

PASE A CONOCERTE¡

VOLVERE¡

Churra dijo...

Por eso esperamos ansiosas la noche , por la fiera que trae .
Un beso

TORO SALVAJE dijo...

Espléndido. Es una maravilla como escribes.

Te felicito.

Saludos.

gaia56 dijo...

un bosque no tiene calles ni asfalto..

[ кeя ] dijo...

me encanta la fotoo! jaj

al final solo somos un recuerdo... un olor, una sonrisa, presas del olvido que acecha impaciente.

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