No penséis que estoy hoy triste. Por lo menos no más que cualquier otro día. En realidad soy una persona jovial y llena de vida, aunque tenga una mirada de nostalgia sobre las cosas, que a veces me asalta y me deja arrastrado sobre un fondo de recuerdos. Pero no era de esto de lo que quería hablar...El otro día sentía la necesidad de abrazar a una persona. Normalmente soy muy sobón y me gusta acariciar manos o rozar brazos, como si eso me acercara mucho más a la gente con la que estoy y mientras me hablan de algo se fueran a dar cuenta mejor así de que de verdad les presto atención. Esto crea en las personas que me rodean cierta inquietud, que a veces me hace sonreír, ya que tampoco entienden muy bien mis gestos...Vivimos en una sociedad en que todo está tan medido que cualquier salida de lo preconcebido tambalea los esquemas...Demostrar emoción, debilidad afectiva hacia alguien, acaso fraternidad y cariño por esa persona puede ser llevado al extremo del acoso o, en mi caso, no demostrar el debido respeto...Qué equivocados vivimos y cómo nos vamos alejando cada vez más de lo que es verdaderamente importante....Pero bueno estamos en primavera y la felicidad tiene tan pocos segundos de existencia en nuestras manos que lo mejor es asumirla según venga y recordarla cuando desaparece.
¿DE QUÉ TE SIRVE?...
Hace 17 horas
11 comentarios:
Amigo Fernando sin duda una reflexión muy personal y que muestra tus deseos y tu manifestación, pero te has parado a pensar si ese deseo y esa manifestación es también sentida o querida o bien recibida por el otro? Siempre el hacer de uno repercute en el otro y no siempre se necesita o se expresa del mismo modo.
De todas formas reconozco que es bonita esta forma de acercarse a los demás, quizás es que nos hemos acostumbrado a que cualquier manifestación simple y llana esconde tras de sí algo más.
Te mando un beso acariciador y sin ninguna otra intención.
María
Yo también soy muy sobona. Y a veces me encuentro en situaciones algo tensas porque esa forma de ser resulta mal entendida. Pero es el precio que hay que pagar por ser cómo uno es. Yo sigo acariciando a mis amigos y cercanos.
Jajaja, Fer gracias por avisar... que eres un poquitin sobón, ya que yo soy distante como el filo de una espada... así que intentaré no incomodarme si algún día tengo el "placer" de conocerte. En fin lo intentaré, pero espero que no sonrias... JAJAJA
un bes "distante" no vaya a ser que me dejes sin respiración. ;)
Yo soy más tonta y mimosa que los gatos (buenos). Será la primavera... A mí es que para estas épocas siempre me pasa. Me vuelve tonta y encima con este fondo musical, tan, tan melancólico, así no se puede.
Un abrazo fuerte
Ayy otro táctil como yo,me encanta tocar,aunque mucha gente no lo entienda...
Aleja las tristezas Fernando,para dos dias que vivimos niño..
Un besito
Me la he pasado hablando sobre el tema. Debemos saber como es el otro, así evitamos malentendidos. A esto me refería cuando traté de explicarme. Lo que para unos es demostración de afecto para otros es falta de respeto, de oscuras intenciones o una señal que se desea algo más que una amistad. Lo que para los segundos es una muestra afectiva para los primeros es frialdad. Debemos de aceptarnos y entender la manera de demostrar cariño de cada persona.
Un gran abrazo con beso
Alba
(esto para que vean que los entiendo aunque en México y otros países cuando se incluye un beso se puede dar a pensar otra cosa, jajaja así que tengan cuidado, no digan que no les advertí)
Qué razón tienes Fernando "qué equivocados vivímos" una de las cosas que nos hace más humanos es el cariño, el roce, el mimo, etc, y sin embargo, parece que nos averguence, o incluso, atemorice demostrarlo. Como si ser carinos@ fuera un vicio más que una virtud. Y tanto la persona que se muestra cariños@ como la que recibe el cariño atrae las sospechas o el recelo de los demás. Y lo que es peor el rechazo. Por eso, a veces, tenemos la necesidad de defendernos, más que del cariño, del pensamiento de los demás. Porque a pesar de que es muy fácil decir que pasamos de la opinión de la gente.
A todos nos molesta que malentiendan nuestro comportamiento, o que se pueda tomar, como bien dices, Fernando, como una falta de respeto.
Con tu permiso, Luisa, la próxima vez que nos veamos, Fernando, pienso darte una abrazo muy, muy, muy fuerte...y sin temor, te lo prometo je,je,je.
Muchos besos, mientras tanto.
Me comentaba un amigo hace unos días que cuando él era jovencito veía a las mujeres en su devenir cotidiano mucho más cercanas y afectuosas entre ellas que ahora. Las mujeres iban abrazadas por la calle, tenían una proximidad física mucho mayor. Ahora, cuando ves ese gesto por la calle, la gente cree advertir "otro tipo de actitud" y tal vez por eso nos mantenemos más distantes entre nosotras.
No sé si será por eso, pero lo que sí es verdad es que hemos reemplazado los hábitos de proximidad y afecto por la aséptica distancia más propia de culturas anglosajonas. No sólo entre nosotras, sino en general y es una pena. Aunque también he de decir que no me gusta que me “soben” cuando no tengo confianza con alguien. O sea… manitas quietas, que muerdo. :-)
Fernando, un abrazo primaveral.
Me quede pensando así que regrese.
¿Has pensado en ella? No la conozco pero cuando no conocemos bien a la otra persona (supongo fue el caso ya que nunca pensaría mal de ti) debemos ser precavidos. Hay muchos hombres que por menos sienten que les estás dando entrada, algunos no puedes ni verlos porque sacan conclusiones equivocadas, esto conduce a problemas, el resultado es que a la menor señal te pongas fría para que entiendan. Hay veces que ni así, es muy incómodo estar en una reunión y no poder voltear en una dirección, estar todo el tiempo cuidandote, no puedes permitirte quedarte sola, te sientes acosada. En cambio hay hombres que aunque te des cuenta que les gustas sino das señales te respetan, puedes platicar y no pasa nada.
Cuando conoces a la persona puedes permitir expresiones cariñosas, sabes que no habrá malinterpretaciones y si eres de las que a pesar de no malentender no te gusta que te acaricien tanto entonces es válido expresarlo sin ofender y aclarando que tú también la aprecias.
Espero te sirva de algo.
Besos
Alba
Estupendo por ti que sabes demostrarlo y vaya con quien no lo entienda...
Ya ves, estoy de regreso. Dicen es de sabios cambiar de opinión jaja.
Haz lo que quieras. Como quiera hay malentendidos y tú por lo menos eres sincero. Si alguien te malinterpreta lo aclaras y ya. Si no te entienden, ni modo la otra persona se lo pierde. Cualquiera que se dé la oportunidad de conocerte sabrá apreciarte. De veras hay muy pocos que sean sinceros, así que sigue así.
Besos
Alba
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