París
No he vuelto a estar en septiembre en París,
cuando caen las hojas y navegan silenciosas
en los charcos de la lluvia.
Puedo recordar tus dedos,
pequeños y fríos dentro de mi anorak,
buscando mi mano, apretándola sin llegar a abarcarla,
recitándome fragmentos de Los versos del capitán de Neruda.
Así, entre la lluvia y el otoño arrimados a nosotros,
pasear por los campos de Marte o a las orillas del Sena
nos procuraba la garantía de la soledad,
la ciudad abandonada en la tarde ante nuestros pies,
mientras el silencio nos alejaba de los demás
y tu voz era la luz que todavía me alumbraba.
Del poemario inedito "Ciudades en los labios"
6 comentarios:
Los dos versos finales son profundamente emocionantes. No se puede definir mejor "tu voz, la luz que me alumbraba". Me gusta mucho este poemario inédito.
La melancolía va desgranando los recuerdos. Abrazos.
Pura nostalgia.
Amor: "mientras el silencio nos alejaba de los demás..."
Besos.
Laura
París es triste y antipático y al mismo tiempo Bello
Al leerte no pude evitar recordar esta canción...
"buscando mi mano, apretándola sin llegar a abarcarla,
recitándome fragmentos de Los versos del capitán de Neruda."
Será que Paris siempre vuelve con formas insospechadas...
Un abrazo,poeta.
Adoro París y tus versos melancólicos. Quiero dedicar un tiempo a perderme entre tus versos y a revisitar París.
Lo necesito.
Un abrazo, Fernando
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