Se pronuncia la sombra,
un hilillo de sangre se abandona entre los tejados,
la daga susurra su baile metálico,
casi todos los silencios van armados.
un hilillo de sangre se abandona entre los tejados,
la daga susurra su baile metálico,
casi todos los silencios van armados.
5 comentarios:
Y hay silencios afilados como las peores dagas..
Un beso, Fernando.
Una forma increíble de describir la llegada de la temida noche solitaria. Al menos, yo lo miro através de éste cristal. Un abrazo, Fernando.
Bellísimo. Poesía pura. En cada verso, un recurso. El poema en sí es el ocaso: cuatro versos deslizándose tan rápido hacia la oscuridad como rápido es el sol cuando se deja caer tras el horizonte.
Un abrazo,
Laura
Es como si las auroras boreales
también jugasen a escribir poesía.
Un bexo en silencio
Un duelo en la oscuridad. Excelente metáfora. Abrazos.
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