Todavía algunas veces huele a humo cuando giro el pomo de la puerta e introduzco la mirada entre la habitación vacía. Mi marido dice que tiene muebles en puro ébano, encajes por las cortinas, cristales de Murano haciendo lámparas y aquellos objetos caros para las envidias. Lo observo y callo mientras ausente corre la ternura.
Seco el ojo al llegar el humo de la nada que fugaz puede en este incendio apostar a cualquier número perdedor. Fantasma efímero, no tienta ni surca el camino de la vida, pues buscando el ocaso entre celos, paranoias y verdades de película, actúa.
Mientras maquillo el pómulo chamuscado tras los nudillos sueltos, procuro moverme despacio, para no incitarlo, también porque no puedo. Sujeto la costilla rota con una venda. Cepillo el cabello mesado a grandes mechones. Y resalto lo que ya no queda, burda estafa de la belleza.
Deglute la cena tras la sonrisa de dientes blancos, perfectos, mordaces de palabras gratas para los amigos y mirada asesina para su esposa –puta, a quien enseñas las piernas, ¡si es que vas provocando! Ya veras luego…Copa tras copa se va animando, el perfecto anfitrión, a quien a veces temo...
Humo busco para esconderme o volatilizarme que ya es de noche.
Sumergida todavía contra la neblina, apuro miedos, dolores y quizás confusiones neutras al vomitar palabras: Perdona amor mío. No me mates, que no te engaño
Estrellaysol
F
10 comentarios:
Delicado tema... jamás entenderé el causar daño a otra persona... jamás entenderé el sentirse dueño de otra persona... suelen ser cobardes... suelen ser insegur@s... suelen ser... animales...
Un abrazo amigo. Marea@
En este caso empatía amarga.
Pensamiento de estrellaesol
Demasiada actualidad. También toca ese tema hoy el blog de Pura. Terrible actualidad.
Besitos varios.
.. que gran relato.. que gran escritora..
No le tengas miedo, tente piedad si le sigues pidiendo perdón.
Fantásticas palabras.
Fernando, precioso e imponente relato que cuenta la crueldad de la absoluta indefensión.
Un abrazo.
Duro relato, la actitud que no se debe tener con esos gallitos cobardes, es la sumisión, hay que ser más valientes que ellos, plantarles cara y denunciarles, por el bien propio y el de las demás víctimas que pueda encontrar en su camino.
Tristemente actual.
Besos, Estrellaysol.
Gracias Fernando por permitir este festival de micro relatos.
Besos a todos
El micro relato es magistral y terriblemente verosímil Estrellaysol. No hay duda de ello. Respecto a la actitud de la protagonista, sinceramente, deja mucho que desear, no enfrentarse al problema y no tener el valor suficiente para marcharse, es formar parte del problema.
Besos
Buen relato, ¿verdad, ficción?.
Ahí está dejando el corazón encogido y ensanchado a su vez de tanta belleza literaria.
Sigiendo Estrellaesol, que es gerundio.
S. Manrique.
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