Deben ser estas arenas o el dolor de los bosques,
porque sólo me mantengo en pie para resguardar mi sombra
a plena luz del día, a pleno sol, en mitad de la nada.
No es agreste la ciudad, no, sólo es un animal dormido.
En domingo los silencios te desarman
porque guardan el aroma de las cosas pequeñas
y traen el sabor de las viejas estaciones de tren
donde siempre esperábamos a alguien que nunca regresaba.
Pero no es el respirar ni esta sangre, que se conmueve por casi todo
y que se mezcla en mi cuerpo con el azul de los recuerdos,
lo que me hace estar ahora mirando a la calle sin las gafas de sol.
Prefiero sentir el aguijón de la luz en mis ojos marrones,
que me lloren entregados a la brisa del oeste.
Es un llanto que me exprime y me libera
como si la tristeza de hoy tuviera una luminosidad especial
y yo no quisiera desviar mi mirada.
Fotografía aquí
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18 comentarios:
Que hermosas imágenes. Es cierto que los domingos los silencios te desarman.
Me gusta ese final, se siente una fortaleza a pesar del llanto.
deben de ser...
curioso contraste emocional este llanto en un domingo de sol...pero hermoso como siempre...
besos
Estoy de acuerdo con Sylvana, hermosas imágenes y hermoso texto"porque sólo me mantengo en pie por resguardar mi sombra...", cómo me identifico con esta frase, Fernando. Genial.
Muchos besos para los dos.
Me quedo con esta frase "traen el sabor de las viejas estaciones de tren
donde siempre esperábamos a alguien que nunca regresaba"
Precioso lo que has escrito
Un besazo Fernando
Si son tediosas las tardes del domingo, por eso una vez más vengo a refugiarme aquí para escuchar a Hilario y leerte Fernando, lo uno inseparable de lo otro, y me sientan bien ambas cosas...
Gracias, un besico.
tú me dueles en lo profundo del sentir
pero hoy es más grande el sufrir...
y no lo sé no lo puedo decir!
♥♥♥besos♥♥♥
en un domingo tedioso, esperando desesperadamente algo que tal vez no suceda nunca, es muy reconfortante leerte.
precioso post.
Los domingos tienen más de 24 horas,
estoy convencido.
Es una jugarreta del Señor.
Precioso poema,
Un saludo,
sergi
Es triste y nostálgico, con ese algo de enfermo que tiene la palabra nostalgia, que debilita y enmudece, que deja las alas rotas.
En una calle cualquiera, un domingo como este es un placer encontrar palabras como estas, que se duelen en sinceras letras y en silabas unidas con alfileres que tratan de coser un alma rota.
Un besito Fernando y que todo panorama de tristeza se vaya tornando más vivo y alegre.
Ana.
Dichosos domingos tan tristes a menudo.
Pero ¿qué tendrá la tristeza que no nos deja apartar la mirada de ella?
Abrazos.
Estupenda foto. A veces la luz duele, es mejor quedarse a la sombra.
Abrazos
Como tú bien dices,
"Prefiero sentir el aguijón de la luz en mis ojos marrones,
que me lloren entregados a la brisa del oeste."
Una gran mezcla de sentimientos cotidianos, que sí, quizás los domingos encontremos el momento para separarlos uno a uno y hacerlos nuestros.
me hizo sentir... un montón.
un bes de domingo (despejado y selecto, jajaja)
;)
Los domingos son un viaje, a veces un tanto amable.
No siempre los recuerdos y el viaje que hacemos nos llenan de nostalgia, pero nos adentra un flujo extraño y denso, que se esparce por las venas.
Como bien decìa ficticio o no, siempre las palabras llegan al corazòn del que lee a purp antojo, y nos desarman y reconstruyen.
Un besazo de lunes:)
A veces la luz también nos ciega...
besos
Para mi los domingos son tardes de Chopin: nocturnos y polonesas. Me pongo especialmente nostálgica. Anuncian el fin de las cosas y atisbo un nuevo principio que, por desconocido, siempre me asusta.
Me gustan esos recuerdos de color azul, son tan bonitos que es imposíble librarse de ellos.
Magnífico poema.
Un beso.
los domingos y yo tenemos un odio cordial...ellos pasan como las nubes y yo miro a otro lado...pero a veces no funciona..ellos se quedan y me hablan y yo pienso en ellos...y uffffff..el ahogo..
f.
como si la tristeza de hoy tuviera una luminosidad especial
y yo no quisiera desviar mi mirada.
A veces no queda más remedio que afrontar.
Besos
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