Desde hacía un tiempo él se levantaba antes, pura rutina, pero los treinta minutos le daban suficiente para sin agobios prepararse y estar ojo avizor al sonido del rellano de la escalera. Se ponía el gabán y la bufanda, todo controlado. A eso de las siete y media se oía abrir una puerta, los tacones de la vecina dejaban su hermoso sonido y el ascensor era llamado para subir hasta el noveno. Todo trascurría como todos los días, una vez desaparecida la vecina en el ascensor salía él y ya notaba la fragancia que le volvía loco, rápidamente tras cerrar con llave la puerta llamaba al ascensor y esperaba ansioso, al abrirse las puertas el perfume le embriagaba y bajaba hasta el garaje, sólo, pero con una sensación increíble: era el único momento de felicidad que le guardaba el día.
Fotografía aquí
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9 comentarios:
como te comprendo!
hay fragancias que
crean inolvidables
recuerdos,pueblan
nuestras vidas....
♥♥♥besos♥♥♥ sigo tan triste...
Hay quienes se conforman con esas sencillas cosas...yo preferirìa que pueda oler a la vecina estando junto a ella:)
El recuerdo de los olores o fragancias es permanente, uno abisma en otros tiempos cuando se vuelven patentes.
Besos, Fer
Realmente nos volvemos como los cactus, una gotita de agua nos da para seguir viviendo. Las gotas de rocío que deja la noche sobre nuestras espinas, sobre nuestra quieta soledad.
Ese perfume en el aire, no en la piel
pasa del aire al recuerdo directamente.
Un beso Fernando.
ana.
Olores y música, la que estoy escuchando una vez más, el Adagio..hoy suena un poco más triste a modo de homenaje...
Otro beso.
como se traspasan sensaciones en pocas palabras, todo un arte.
abrazos
Lo mejor de la vida, son esos momentos del día que lo hacen especial.
Recuerdos me vienen de momentos así en otros momentos y sin ascensor.
No diré que fueran los únicos agradables pero sí los más emocionantes.
Un abrazo
Hay aromas que se clavan en el alma como un deseo.
A veces es mejor imaginar.
Si coincidieran los dos en el ascensor él no disfrutaría tanto del momento, probablemente.
besos
ETDN
Cuántas veces realizamos acciones aparentemente inútiles con el único objeto de obtener un ligero placer a cambio.
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