El tren expreso llevaba su horario habitual en aquella noche de noviembre, había dejado Venta de Baños atrás y un sinfín de conexiones de raíles que sonaban como un zarpazo en el vagón. Ella le miraba con una extraña sonrisa que dejaba ver la luz mortecina del compartimiento. En realidad no sabía para que habían bajado la fuerza de las bombillas, los dos estaban muy despiertos y las otras dos personas que estaban con ellos y también iban a Barcelona, al final del trayecto, eran ciegos, de origen gallego como bien habían contado, volviendo a la ciudad condal. Eran ciegos pero no mudos, hablaban por los codos y tanto la muchacha como él les respondían ya cansados de tantas palabras sin ningún fin. Se acomodaron bien, los cuatro se pudieron echar largos juntando los asientos y sin dejar pasillo en el centro, el sintió las piernas de ella y le gusto ese roce que enseguida dedujo intencionado y que le produjo una erección automática apenas disimulada aduciendo al frío reinante y colocando los gabanes suyo y de ella encima de los cuerpos. La noche quedó amortiguada por las idas y venidas de las manos de ambos y cuando el tren llegó a Zaragoza no había ni un milímetro que ambos no conocieran del otro…y aún quedaban varias horas de viaje.
Fotografía aquí
16 comentarios:
Uyy, uyy,uy, haber esas manos, que luego van al pan, je,je,je. Desde luego no podrán decir(los protagonistas), que fue un viaje aburrido y frío, por otro lado, quién se acordaría de las incomodidades?.
Un buen texto, Fernando.
Muchos besos.
Casi cono de película. Lo normal es que te toque gente insufrible que más te provocan agujetas que erecciones.
Claro que para hacer un relato bonito mejor imaginarlo así.
Un abrazo
sólo puedo decir Ybris que..los ciegos eran ciegos, el viaje real, el tren existía, la mujer era mujer...ah..y por cierto se pasa por Venta de Baños...saludos..
f
Ummm tú sabes si se puede hacer reserva para un viaje así? jeje.
Fantástico viaje, como jugar a las tinieblas cuando uno era crío y con el ritmo del tren...
Un beso, Fernando.
No todo es bueno con la llegada del AVE. Se pierden otros "alicientes". Venta de Ba�os, evocador nudo ferroviario, met�fora de un nudo corporal.
Abrazos
precioso
siempre he lamentado
no haber vivido
un viaje tan"movido"
y casi encantado...
los ciegos tienen sentidos
muy desarrollados...
♥♥♥besos♥♥♥
Oye... ¿y qué hicisteis con los ciegos?
PUES LA VERDAD ERAN UN SEÑOR Y UNA SEÑORA..PAREJA..NO SÉ SI HICIERON ALGO DE MENCIÓN...NO ESTABA YO PARA ESOS MENESTERES
f
sin duda un viaje excitante...
Besos
Un viaje inolvidable, ¿tuvo parada y fin de trayecto ?
Besos
tuvo final...feliz y recuerdos.
f.
“…aun quedaban varias horas de viaje”
Los viajes en tren son un escenario especial para todo tipo de vivencias…debe ser que el traqueteo, el ambiente, la proximidad…dispara las sensaciones y todo cobra un cariz especial.
¿Habrá mas paradas?...”¡¡ Viajeros al tren”
Un saludo.
Un relato sugestivo.
El roce, unido a un viaje que se alarga es una bella fantasìa.
Waw.
Un besazo, Fer
A esto le llamo yo un buen viaje, si.
Mmm, yo tengo en ciernes coger un largo tren....pero quita, quita, no la liemos jejejeje.
PD Cuidadín con el oído de los ciegos. Creo yo que..
Ojalá todos los viajes fueran así. Ya regrese.
Besos
Alba
kjajkajka wena wena!
aunque bastante curioso, el relato se produce en España, sobre un Tren Chileno, 2 paises en un mismo relato!
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