Entro en la habitación, entro en la tierra
donde tú no posees más que mi piel desnuda.
Tu cuerpo
bajo la luz de la tarde trae mil naves, me convoca:
ciérrame los caminos que asaltan las ventanas como respiraciones,
oh cómo duele el cielo a través de tus manos -
cómo duele la arena del desierto y el viento,
duele hasta el paladar,
duele el presentimiento
de un beso en carne viva sobre la hoguera
y la sal de las estalactitas. Desciendo, bajo por la escarpada
oquedad que has abierto y me pierdo
entre las explosiones,
bajo el silencio final de las ametralladoras.
¡Llámame! Tengo necesidad de oír mi nombre
como si fueras inmensamente rico y pudieras comprármelo.
Poema de María Luisa Miñana
Fotografía aquí
8 comentarios:
ciérrame los caminos que asaltan las ventanas como respiraciones...¡Llámame! Tengo necesidad de oír mi nombre...
La necesidad de sabernos...bello poema.
Besos
Alba
Que distinto suena nuestro nombre en esos labios, no?
Me encantó este poema..
Encantadora Luisa.
Y mucho más con los poemas tan bellos que deja de vez en cuando.
Gracias los dos.
Luisa!! guapa!!
Ay, esos besos en carne viva. Luisa que te pierdes, je,je,je. Ahora, en serio es un poema fantástico y me han llamado la atención especialmente estos:"entro en la tierra donde tú no posees más que mi piel desnuda" y "como si fueras inmensamente rico y pudieras comprármelo". Genial Luisa. Besos para ti y Fernando.
Gracias a todos. Sois un montón de guapos y generosos. Y gracias a Fernando por esta excelente idea, que esperamos repita.
Abrazos.
M.Luisa es precioso.
mapi j.
Joer, me lo había missing. Pedazo de poema. Luisa, pásame el phono del prota. No es para mí, es para "una amiga"
Bellísimo texto.
M
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