La poesía es un arma que se dispara sola como el amor de un loco

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martes, 11 de diciembre de 2007

Ráfaga de luz





Quien derrotó a la soledad

nunca temió ser sólo eso,

una ráfaga buscando el encuentro.



Fotografía aquí

15 comentarios:

Abril Pérez dijo...

¿Cómo se consigue derrotarla?

¿Dejando de tenerle miedo?

¿tu lo has conseguido?

Muchos besos pequeñitos...

albalpha dijo...

Vaya! no dejas de sorprenderme.
Precioso, no es necesario decir más.
un gran abrazo

ybris dijo...

Preciso. No se necesita más que ser ráfaga a la busca de un encuentro.
Una buena manera de nunca sentirnos solos.

Abrazos

entrenomadas dijo...

Al sr. mantenedor del este blog.

A ver, ese faro es mío, tengo la llave en el bolsillo. Eso sí, su poema es muy bello. Mi faro también.

entrenomadas dijo...

Al sr. mantenedor del este blog.

A ver, ese faro es mío, tengo la llave en el bolsillo. Eso sí, su poema es muy bello. Mi faro también.

Tris dijo...

Derrotar a la soledad... es llegar a la cima de una monta�a, s� con esfuerzo, pero lo que tus ojos tienen el privilegio de ver... el esfuerzo es poco.
En fin a que venia lo de la monta�a?

Un beso ;)

Gubia dijo...

Que bonita foto y que bonitas palabras.Algún día me tienes que contar tu secreto, una vez más y aunque me repita, me encanta leerte.Un abrazo.

Edanmir dijo...

Siempre ser constante, quizá una brisa la derrote del todo. Salu2.

Fernando dijo...

¿Quien teme a la soledad para ver en ella un enemigo? Acompañar a la soledad, puede ser, un viaje agradable siempre y cuando no aproveche para clavarte la rosa en la espalda.

Doberka dijo...

El tiempo es tu aliado Fernando, esas ráfagas de luz, iluminan cualquier tipo de soledad, y derrotas las nuestras con tus hermosos poemas. Besos Fernando.

ana dijo...

Los faros siempre han tenido un atractivo especial para mi. Altivos, retadores y solitarios casi siempre,
su luz entrando en ráfagas intermitentes en mi casa, por mi ventana
Vivo a pocos metros de uno, lo veo desde mi ventana, siempre ahí, solitario centinela en las noches de tormenta.
Un saludo Fernando,
ana.

Fernando dijo...

no sé como derrotar a la soledad de cada uno....la mía se dirige exactamente a mis ojos y me mira en el silencio en que a veces habito...va conmigo y en todas partes se muestra como una mirada herida...guardo palabras que ella me da y guardo cicatrices que a veces me causa...pero es la vida una gran soledad ante un espejo roto...no hay salvación de ella...la otra soledad es mucho más sencilla, en nuestras manos la amistad, el amor, la pasión, el deseo...todo es factible para derrotarla...gracias a todos.


f.

Anónimo dijo...

Quizá eso somos, una ráfaga errante que busca. Esa búsqueda puede que sea el fin último de muchos. No podrías haberlo dicho mejor!

Simplemente Olimpia. dijo...

Todo?...quizá haya que batallar, estar en un lance continuo con ella, pero....por que no acompañar a la soledad?...ya, ya sé que el verso no busca el eso...sólo llegar.

Vigoroso poema.

Olimpia.

Fernando dijo...

de todas maneras no hay luz suficiente para aplacar la soledad...sólo hay instantes donde se conmueve.

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