En esta mañana de niebla alta y desvalida
oigo cantar a Maria Callas una aria que me lleva lejos.
A través de la ventana cruzo el invierno
y sujeto tu cintura con mis brazos.
Ya sé que no estuvimos juntos en París,
que no lo estaremos ni ahora ni nunca
porque no hay nada más tajante
que el no querer y el paso del tiempo juntos.
Sin embargo, pienso en los puentes que cruzan el Sena,
en esas mañanas de primavera cercanas al verano,
cuando todavía hay un poco de tranquilidad
y se puede pasear como si la ciudad fuera tuya.
Allí, en ese fugaz instante te diviso de mi mano
mientras me cuentas las cosas que nos han separado
y esas historias en que nunca he estado contigo.
Podría decir que la música me ha hecho feliz.
Fotografía
aquí
14 comentarios:
Sin duda, un lugar excepcional para sobrevivir a estas fechas...
Si me pierdo... ¡búscame allí!
Qué romántica suena esta historia, aunque deja sabor a resignación, pero se mezclan, pienso yo, suaves ecos de esperanza y la ilusión de que algunos deseos se cumplan. Nunca se sabe.
Comparto contigo la felicidad que nos regala la música Fernando y con tu poema-relato, quizá, algún eco esperanzador que nunca nos debe faltar. Muchos besos.
Visité París en invierno así que no puedo opinar sobre la magia de la primavera allí, pero con frío y niebla sigue siendo un bonito lugar para vivir, olvidar o para recordar. Un abrazo.
Me ha gustado, ese sabor agridulce refleja perdida pero también esperanza, los puentes que cruzan el Sena enmarcan muy bien esa sensación,
Abrazos
La voz de María Callas tiene eso, que nos puede llevar desde il Castello di Sant'Angelo, hasta el mismísimo Montmartre, corazón de la Bohème...
X
Maria Callas, qué maravilla.
Un bello poema, Fernando.
Besos
La música nos lleva a tantos lados, es maravillosa.
abrazos
Siempre poner un tema a moroso en París es un acierto. Abrazos.
Alguna vez, esas escenas, a base de ser soñadas, llegan casi a ser reales, notando la palma del otro en la tuya.
Precioso poema.
Puentes sobre el Sena...
Sitios imprescindibles para ver o soñar el el paso del tiempo.
Un abrazo
Ella siempre hablarà de las cosas que no tuvo y sentirà amargura por ello...
No està nada mal tener una Marìa Callas que pueda animarte un poco.
Un beso, Fer
si he de soñar que sea en París..
Incongruente ese "no querer" y sin embargo llevarla a París...contradictorio...uno no sueña lo que no quiere, y menos con un aria de Callas que como bien relatas conmueve y burla cualquier ausencia.
Quizá París sea el mejor sitio donde contar lo que se ha callado....pero a mi me sirve cualquier lugar donde la palabra pueda expresarse libre y sedosa.
OLimpia.
tal vez la que no quiere sea ella y el que narra sabe que será imposible aunque él sí quiera...
f.
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