Recorro las calles donde se siguen besando los amantes
desperdigados en lo oscuro como entonces lo hacíamos nosotros.
Bebo en los bares y en las miradas perdidas que el tiempo nos ha dejado.
Tendidos en las cuerdas, en las barras,
entre los flecos de una conversación
siguen los mismos envejecidos y errantes sempiternos borrachos.
Ahora las camareras pueden ser como mucho
mis hermanas pequeñas, mis sobrinas,
las hijas que no tuve, las de mis amigos muertos.
Así, sólo y por una vez más me emborracho
para tener la decencia de olvidarte.
Fotografía
aquí
10 comentarios:
Siempre pensé que el olvido era la peor de la traiciones o el mejor de los golpes. Creo que todavía no me he emborrachado para "tener la decencia de olvidarte" o quizás no me he enterado de las verdaderas razones.
Salu2 Córneos.
Asi son los recuerdos, te hacen pagar un alto precio para desaparecer, o no los recuperas de ninguna de las maneras. Salu2
Empecinado en olvidarla la recuerdas con una copa en la mano.
La imagen no se corresponde con la tuya:)
Huyamos caminando tranquilos por la oscuridad de las frìas calles y recordemos los viejos tiempos que nunca hemos vivido juntos.
Un beso màs, Fer, que te me hacès muy creìble en estas tristezas.
Cuánta gente hay en tu poema de hoy.
Magnífico.
Saludos.
Esto suena grave Fernando. Pero ya lo dice una canción: "no es que sea el alcohol la mejor medicina, pero ayuda olvidar cuando no ves la salida." Opino que no es una buena idea, porque despues ya se sabe(la misma canción):"las nubes se van, pero el sol no regresa".
Espero que sólo sea un poema-relato más.
P.D. Aprovecho tu blog para saldar una deuda con Luisa, con tu permiso Fernando, cuando te comuniques con ella, por favor, dale dos besos y dile de mi parte FELIZ NAVIDAD. No tengo perdón.
Esos momentos..., sin embargo al emborracharse se recuerda...
abrazos
si he de ser sincero hace mucho que no me emborracho...pero no penseís que no lo he hecho para olvidar..que sí...pero no da resultado..ahora recorrer los viejos garitos y ver como ha cambiado todo, excepto los empecinados en acabar allí también da para emborracharse..
no hace falta alcohol para emborrachar al cuerpo y al alma...y menos el olvido.
Por una vez...sólo...imposible olvidar cuando se recorre el camino de los recuerdos, de lo vivido, cuando la indecencia es querrer no olvidar, emborracharse no es la manera idónea de promover el deseo de hacerlo.
Al menos el intento revela el deseo.
Olimpia,
beber por beber...cualquier excusa es buena contraa la depresión...ser sincero también es bueno aunque acabes borracho..
f.
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