Se cruza la soledad como una dama recién salida de la ducha y en su desnudo me trae el olor ardiente de las cerezas muertas. Nada de lo que me rodea conserva el menor sabor a ti y sin embargo en esta noche de aspavientos he de reconocer que las camareras me abren sus bocas y en sus lenguas se escribe una canción con el aroma de su saliva y les siento bajo la ajustada blusa el pálpito de lo imposible.
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10 comentarios:
Que alta se hace la barra en la mayoría de los casos. Deja un poco de amargura y desamparo tu relato. Salu2.
Las camareras son un buen aliciente en una solitaria noche, la brisa de su paso nos transporta en medio de la mutua seducciòn.
No està nada mal, Fer, si lo vieras de esa forma.
Un abrazo
Quien no deseo una camarera es que nunca estuvo bajo el poderoso influjo de la noche.
Salu2 Córneos.
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Siempre alguna vez nos hemos dejado arrastrar por la noche, a veces dejandonos seducir, y otras simplemente intentado descubrir qué hacemos inmersos en esos lugares.
Un abrazo!
Hello!!!
Yo... me fijo en los camareros, jajaja
Se cruza la soledad... bajo la ajustada blusa el pálpito de lo imposible.
Instantes de soledad, tristes, pero descrito bellamente. Como una dama recién salida de la ducha...
un abrzo lleno de besos :D
Puede que ella se reconozco en esa soledad, por eso toma su forma y te seduce....la tentación de lo imposible es lo que mas nos conmueve y paraliza.
Deseando leer el siguiente capítulo
Olimpia.
Yo, como Ynarud, me fijo más en los camareros, si.
Esas miradas, esos pensamientos podrían ser un buen bálsamo para la soledad...a veces.
Cuando he tenido "amigas" camareras lo peor era lo tarde en que se soltaban del trabajo.
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