La poesía es un arma que se dispara sola como el amor de un loco

Contribuyentes

sábado, 29 de abril de 2017

No sé dónde adquirí esta distancia









No sé dónde adquirí esta distancia, este deshacerme como un husillo de hilo negro en medio de la oscuridad. No sé por qué entre mis dedos queda el azul y el rojo impregnándome de todo lo que la vida rechaza como mío mientras sigue siendo corriente de aire, nube, cerro, surco de agua, rayo de luz, quejido en el viento, un lamento tras otro que me murmura.
Algo tan cierto como mi silencio, porque estas palabras son silencio, el azabache que saco al hurgar adentro, ciertos amuletos que debo dejar en este muro para que rompan los hechizos, para que me perdone el alba.
Yo quisiera que la argucia de un verso se hiciera isla en medio del atardecer, un archipiélago de sirenas y faros que en su morse natural nos dieran calma, pero no puedo, solo escribo para que salga a borbotones mi sangre, que se cautericen las heridas, que al mirarme no vea los despojos y que algo de lo que siento tenga la semilla de un rosal leñoso de montaña, que deje sus flores rojas aromatizar la primavera.





f.







No hay comentarios:

Programa Electroletras

Con versos en la noche

Mi lista de blogs

Seguidores

Vídeos de poesía para perdidos

Ahora en youtube

Los poemarios

Los poemarios
© (Copyright) Fernando Sarría de todos los contenidos originales de este blog, excepto cuando se señale otro autor.

Archivo del blog