Me derribo despacio como un viejo edificio,
y siento cada golpe del mazo
desgarrando los muros,
las antiguas ventanas sin cristales,
los vacíos pasillos y las estancias sin alma
donde solo el polvo siembra su simiente de olvido.
f.
La poesía es un arma que se dispara sola como el amor de un loco
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