He dormido en ti, entregado.
Hay sudores amplios que nos saben.
La tibia sensación nos despierta en la hora cóncava,
la aurora brumosa deja el aroma del silencio.
Envueltos todavía en la magia
mis dedos guardan tus caminos,
tu boca el enredo de mi senda.
f.
No hay comentarios:
Publicar un comentario