Miro el cielo abatido por la oscuridad.
Lejos debe haber una verdad diferente
con senderos de milenios y fuego
que apenas caben entre mis manos de hombre.
Perdono todo en estas horas de lluvia,
solo escucho respirar la tristeza
como un habitante solitario de la noche.
f.
No hay comentarios:
Publicar un comentario