La poesía es un arma que se dispara sola como el amor de un loco

Contribuyentes

miércoles, 20 de febrero de 2008

LA HIJA DE BALTHUS






Y mientras las cosas se caían a pedazos nadie prestaba mucha atención.
Talking Heads




Siempre se aprende de lo que está más cerca.
Pelo negro, cuello a lo Lucy Johnson,
labios sin pintar, jersey ceñido
azul cobalto
y un gin tonic contra la pena.
Los ojos ardiendo, páginas leídas con los dedos.
Mírala, sentada, una tarde en Madrid
rompiendo relojes para sacar el tiempo.
El paso del tiempo
como un vencejo que todo lo hace en el aire.
Porteadores mestizos de Zanzíbar. Deliciosa miel, tabaco,
dientes de tiburón.
Negras de pezones duros, hermosas cabezas.
El paso del tiempo.

Las viejas ciudades del interior nunca olvidan el mar.

Una tarde en Madrid con la hija de Balthus.

Poema de David Mayor




Fotografía aquí

3 comentarios:

albalpha dijo...

Las viejas ciudades del interior nunca olvidan el mar.
Bello poema.
Abrazos
Alba

Doberka dijo...

Me encantan todos tus poemas, David. Lo sabes, este también me gusta porque es muy visual. Tiene que ser estupendo oírtelo narrar con esa voz tuya tan desgarradora.
Muchos besos para todos, y gracias por tus poemas, David.

ybris dijo...

Aprender de lo de cerca.
Sin olvidar el mar.

Bellas consignas.

Un abrazo.

Programa Electroletras

Con versos en la noche

Mi lista de blogs

Seguidores

Vídeos de poesía para perdidos

Ahora en youtube

Los poemarios

Los poemarios
© (Copyright) Fernando Sarría de todos los contenidos originales de este blog, excepto cuando se señale otro autor.

Archivo del blog