Recojo el frío de los días.
Esta ausencia de palabras.
Silencio sin ataduras.
He vuelto desde la oscuridad a ser oscuridad:
un viaje para recordar donde nací,
de dónde vengo, dónde he de volver a morir.
Simiente de flores que roban los pájaros.
Aún así vigilo el almendro,
su incipiente luz contra la bruma...
Nacer sin desaparecer.
Ser sin esperar nada.
Contracorriente.
Se estremece en mi corazón
cada flor nueva que se abrirá entre la nieve.
Solo esperar, contemplar, sentir.
f.
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