Resbalo por tu espalda y me hago dueño de tus palabras,
una armonía de huellas brillan en ella,
los hilos que enhebro tienen la cadencia del deseo.
Rota e insegura trazaste una línea Maginot entre los dos.
Invisible y ya sin defensas la cruzo
en el momento en que tus dedos
buscan en mi vientre nuevas razones,
precisas y tangibles cuando tus manos cercan mi sexo
y tu boca me deja junto a la dulzura de los labios el sabor de la noche.
Esta noche tuya, ardiente y oscura por el humo de los cigarrillos
y ebria por los gintonics de G’ Vine
con hielo picado que hemos bebido.
Andas sobre mí como una gata herida,
me dejas junto a la marca de tus uñas el desliz de tu lengua,
y estremecido por el vaho cálido de tu respiración sobre mi,
tus besos me saben cada vez más a los aromas del enebro
y a las uvas verdes de las campiñas de Francia.
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9 comentarios:
No hay nada como la sensualidad de tus versos para combatir el frío otoño.
Un beso,
X
Después de unos gintonics lo mejor es una gran noche de amor y deseo.
Felicidades por tus bellas palabras
Un saludo
Genial. Escribes de lujo. Abrazos.
Además de escribir como los dioses, eres un verdadero sibarita. Me voy a preparar un gintonic de G'Vine a tu salud.
¡Salud, Maestro!
Opino como Noray, tienes un gusto exquisito, para escribir y para vivir, ¡lo que aprendo de vosotros!, ni siquiera conocía la existencia de esa ginebra.
Siempre me gustan tus poemas, si no es por una cosa, es por otra.
Un beso, precioso, cruzo los dedos.
Esta noche solo me reclino ante el poder de tu palabra.
Bendito seas.
M.
Dulce amanecer que con tan altas llamas resurge como Fénix de las cenizas de la noche.
Abrazos.
SIEMPRE CONSIGUES EMOCIONARME!
hielo picado, gintocnis, besos, uvas verdes, aromas del enebro...todos los "ingredientes" que agregas hacen de esta composición literaria una receta perfecta, de erotismos, deseos abismales, placeres desenfrenados....
Me fascina.
Que pululen aquellas inspiraciones, tus poemas serán mi pan de cada día.
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