Del rencor que tiene la sombra
cuando lentamente
adquiere visos de tapia o recodo de susurros;
Del lugar habitado por el estruendo silencioso de un gato
al caminar sereno en busca de un cojín y de su sueño;
Así como te hablo,
lentamente pero fogoso,
mirándote a los ojos,
vestido por la púrpura de un crepúsculo
y en el círculo invisible e intangible
en que nos respiramos el uno al otro;
Así es en parte la vida, un instante,
su fugaz fuego,
su alevosía,
su total deshacer en las corrientes
que sostienen el aire de una casa,
un zaguán de albas o una muerte pequeña
donde sin saberlo nos pensamos solos.
cuando lentamente
adquiere visos de tapia o recodo de susurros;
Del lugar habitado por el estruendo silencioso de un gato
al caminar sereno en busca de un cojín y de su sueño;
Así como te hablo,
lentamente pero fogoso,
mirándote a los ojos,
vestido por la púrpura de un crepúsculo
y en el círculo invisible e intangible
en que nos respiramos el uno al otro;
Así es en parte la vida, un instante,
su fugaz fuego,
su alevosía,
su total deshacer en las corrientes
que sostienen el aire de una casa,
un zaguán de albas o una muerte pequeña
donde sin saberlo nos pensamos solos.
F
2 comentarios:
que seductor letrado
Felicitacioes Fernando
Así como te hablo,
lentamente pero fogoso,
mirándote a los ojos,
vestido por la púrpura de un crepúsculo
y en el círculo invisible e intangible
en que nos respiramos el uno al otro
allí las palabras se deshacen y se saborean liquidamente
A veces la sombra es rencorosa.
Otras veces es la mejor imagen que tenemos de nosotros mismos.
Abrazos.
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