Va a llegar un tren donde mis ojos puedan verlo, siempre miro a los trenes con el dolor del viaje perdido y esa afabilidad que al final te dan las desapariciones…nunca será posible rellenar todos los huecos, ni siquiera rehacerse del desierto rojo en que uno habita durante parte de su vida…nunca mi vida ha sido más completa que ahora y cada vez me siento más pobre, sin angustia, no hablo de la desolación de los amaneceres, ni siquiera de la soledad intima, esa que tememos y aunque nos aferremos a él o a ella no desaparece sino que te consume con sus besos de fría humedad…siento el saludo arcaico del tiempo…su sauce enalteciendo la noche con su baile de ramas cubiertas con mi nombre, otros nombres, otras historias, otros olvidos…
Va a llegar un tren hasta mi puerta, tengo billetes de primera, quizás sea mejor no demorarme y sentir ese bullicio en la garganta…pero cuántas de mis derrotas no tomaron ya otros trenes?...siento el peso de las cartas amarillas, de las postales sepia, de los teléfonos antiguos, de los amores perdidos en la piel de los veranos, de todas las mentiras que guardo en los cajones, de todas las verdades que se llevan los pájaros, de todos los amores que he negado por miedo a un nuevo fracaso, por todas las botellas de ginebra que me bebí solo oyendo mis latidos (el Freedom, el Bohemio's, el Mobby Dick...), por todos los que me creían pequeño, grande, listo o tonto, por todos los que me saben, callan y han sujetado mi tiempo a sus relojes de pulsera…
Va a llegar un tren hasta mi puerta y no es al mar a donde me lleva, ni al bosque de las nieves…este tren me lleva al centro de un desierto y su nombre sigue siendo noviembre.
Va a llegar un tren hasta mi puerta, tengo billetes de primera, quizás sea mejor no demorarme y sentir ese bullicio en la garganta…pero cuántas de mis derrotas no tomaron ya otros trenes?...siento el peso de las cartas amarillas, de las postales sepia, de los teléfonos antiguos, de los amores perdidos en la piel de los veranos, de todas las mentiras que guardo en los cajones, de todas las verdades que se llevan los pájaros, de todos los amores que he negado por miedo a un nuevo fracaso, por todas las botellas de ginebra que me bebí solo oyendo mis latidos (el Freedom, el Bohemio's, el Mobby Dick...), por todos los que me creían pequeño, grande, listo o tonto, por todos los que me saben, callan y han sujetado mi tiempo a sus relojes de pulsera…
Va a llegar un tren hasta mi puerta y no es al mar a donde me lleva, ni al bosque de las nieves…este tren me lleva al centro de un desierto y su nombre sigue siendo noviembre.
Pensad que a veces duermo poco.
15 comentarios:
Por la hora yo diría que hoy prácticamente nada.
Casi tienes noviembre vencido.
Beso s
Con un poco de suerte, ese tren podría ser de ida y vuelta... llega, mira y si no te convence, no te bajes de tu compartimento.
Un abrazo amigo. Marea@
p.d. duerme y descansa, el tran tran del tren mecerá tu sueño.
Hay trenes que nos llevan indefectiblemente para adentro.
Besos.
Un beso.
Cuando acabe noviembre hemos de celebrarlo. Te propongo un gin tonic y unas risas.
Es que el mes de Noviembre es muy jodido, te resfrias, duermes poco, menos mal que ahora llega Diciembre que es muy socorrido
Un besito de cariño
Fijaté que estoy por coger ese tren contigo..
Un beso
..Sincronicemos los relojes, amigo...Un abrazo.
Los trenes siempre nos deparan sorpresas hacia lugares inesperados. Un abrazo.
Te luce mucho dormir poco.
Beso.
En mis sueños he perdido muchos trenes. Abrazos.
que el tren que esperas te lleve a una grata estacion donde puedas sentirte tranquilo y en paz...
besos
Ojalá mis insomnios me sirvieran para poderme expresar así, aunque sea casi lo mismo que siento yo, y que seguro sentimos much@s, a pesar de no tener el mismo nombre.
Noviembre se acaba, se acaba lentamente.
Felices y dulces sueños, Fernando, un beso.
Qué problema tienes con este mes Fernando?Solo parece que te llenase de ansias que van atadas a una verdad triste..
Besitos
Ahora mismo subiría a ese tren si me llevara lejos y me devolviera el 9 de diciembre.
Creo que en el fondo amigo Fernando eres afortunado (aunque tú quizás no lo veas así), vives la vida viviendo sus matices, sus limitaciones, sus propias oposiciones a nuestro mismo ser… quizás quisiéramos abrazarla en toda su plenitud y nos damos cuenta, con el pasar del tiempo, que eso es imposible. La vida es un camino infinito transitado por seres finitos que entrelazados dan “sentido” a ese caminar, a ese recorrido. ¿Qué sentido? No creo que nadie pueda contestar a ese interrogante porque nada, ni nadie permanece eternamente.
Las personas con cierta sensibilidad perciben de alguna forma esa limitación, esa periodicidad de las cosas, a lo largo de la historia imagino que todas las manifestaciones, pensamientos y elucubraciones habrán sido sentidas, vividas, estudiadas, analizadas y en la medida de los posible definidas, pero el hombre por sí mismo, por propia naturaleza vive y siente momentos o etapas de angustia, de desconocimiento y de interrogantes… todos estamos en el mismo barco, perdidos en el mismo bosque o cubiertos de la misma noche.
Hermoso texto, para escribir sobre él, largo y tendido, aunque… sin respuesta clara, en mi caso ínfimas elucubraciones.
Un abrazo amigo.
Publicar un comentario