
1
En realidad, uno va haciendo,
con el paso de los años,
al otro.
Nos modelamos,
nos vamos forjando mutuamente,
a empellones y gestos recíprocos.
Venir a mí, ir hacia tí
Más y más dentro de nosotros,
más y más tú
o yo,
según la circunstancia.
Esto
(al parecer)
es estar juntos.
2
Pendientes uno del otro
hasta el hartazgo.
Sin embargo,
si al pueblo me voy
me dices con razón
no me gusta dejarte solo.
3
Me siento orgulloso al cabo de los años
He perdido mucho tiempo en tu cuerpo.
Te preguntas: “tantas horas juntos
¿no serán demasiadas?”
5
Para darse de baja no hay formularios
Resulta todo
—a esta altura—
muy complicado
Así lo hemos aceptado
para sobrevivir juntos.
6
Vas y vienes
voy y vengo
te alejas dolorida,
me aparto
pero en el enfado está el germen del regreso
y volvemos
irremediables,
porque en alguna parte de nosotros estamos siempre aquí
más y más dentro de nosotros
(que es uno y el otro)
condenados,
aunque la posibilidad de escapar es una libertad
que ninguno quiere perder.
7
Lo dijo el poeta:
En alguna parte en nosotros estamos siempre juntos
somos siempre tú hasta la confusión y el trastocamiento
Yo no lo diría nunca, pero en eso pienso:
No te abandonaré jamás, aunque me lo rogaras
que no lo harás,
estoy seguro.
8
Estamos conectados de una forma dolorosa
No podemos irnos todavía
Tú y yo hemos venido tantas veces
El camino ha sido el mismo
a lo largo de estos treinta años
y queda (espero) un trecho a compartir
Vamos a quedarnos un poco más
no vaya a ser que debamos emprender el regreso en solitario.
9
Cuando cierras la ventana
por temor a las corrientes de aire
tengo más frío.
10
RULETA RUSA
No te vayas primero,
te lo ruego
No me hagas eso,
no me dejes solo (¿sola?) justo ahora.
Sonríes
girando el tambor
Disparas
y me pasas el revólver.
Poema de Fernando Ainsa
Fotografía aquí
4 comentarios:
Lo que he leído de Fernando Ainsa me gusta mucho. Además es un encanto de persona.
El poema es muy bello.
Kisses
Sonríes
girando el tambor
Disparas
y me pasas el revólver.
Precioso. abrazos
SEnsible y sabio Fernando. Precioso y muy sutil.
Envidiable el poema y lo que trasmite. Gracias Fernando Ainsa y besos para los dos.
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