
Ahora que mi boca sabe recorrerte despacio,
tan lentamente como largas son las tardes de principio del verano,
ahora que sé de los recodos el dolor de cada silaba en tu piel,
el estremecido comienzo de un viaje tras otro,
la humedad, el rincón de los silencios,
las cumbres y su atalaya,
cada verso gutural con que me llamas
pronunciando el misterio de tus labios sonrosados
y ese deshacer del tiempo de tus dedos en mi pelo…
Ahora puedo pronunciarte en cada verso
y saber del fuego la intensidad de la llama
como del mar oscurecido
sé del ir y venir de las mareas victoriosas.
"cada verso gutural con que me llamas" esto es grandioso, Fernando. Un poema bellísimo.
ResponderEliminarSaludos.
Pase lo que pase,
ResponderEliminaraunque me odies con rabia.
Sea lo que sea.
Apáguese el sol,
derrúmbese el cielo,
entiérrese mi recuerdo en tu memoria…
No te dejaré.
Ahora ya te lo he dicho.
Fernando...siempre estoy volviendo...siempre.
ResponderEliminarHermosa foto.
Adeu
Las mareas nunca son victoriosas, acaso cuando consiguen secuestrar algo dejado en la arena y llevarlo mar adentro.
ResponderEliminar*
Bellas palabras y unidas a coloreados sentimientos amigo mío... las mareas salen victoriosas cada vez q logran conquistar esas orillas de arena tan provocadoras...
ResponderEliminarUn abrazo. Marea@
Simplemente precioso. Qué sabio es el amor. Cuanto sabe de la memoria. Traza mapas en desiertos de piel donde otros se perderían. Yo quiero uno que sepa.
ResponderEliminarUn beso.
Pues sí, en el amor, esas mareas victoriosas tan pronto van como vienen. Saber de eso es aprender a querer.
ResponderEliminarQué bien lo recoge el poema.
Un beso.
Es un texto precioso que me ha hecho reflexionar: me queda la duda de si el amor es mejor cuando ya conoces todas esas marcas o en el momento en que realizas la primera aproximación a ellas.
ResponderEliminarDeslizarse por esas palabras, oír la música y ver esa imagen te hace sentir intensamente, tienes un gran poder de seducción.
ResponderEliminarUn besazo.
siempre el incesanto rumor del deseo en tus manos...
ResponderEliminarUn recorrido perfecto, que no admite interrupciones. Abrazos.
ResponderEliminar.. preciosos versos, marinero..
ResponderEliminar"Ahora que mi boca sabe recorrerte despacio,"
ResponderEliminar"sé del ir y venir de las mareas victoriosas."
Ahora que mi mirada sabe leerte despacio... sé del ir y venir de tus versos...
un bes
Al conocimiento de lo más misterioso y escondido, encarnado en el fuego y el mar, se llega a través del conocimiento del ser amado.
ResponderEliminarEs un pensamiento certero que describe muy bien la sensación de plenitud del amor y de su entrega.
Bello, como siempre.
Laura
Buen poema, Fernando.
ResponderEliminarSaludos.