domingo, 21 de agosto de 2011

Poemas para una exposición XII










Nadie me espera ya con el ansia de darme lo mismo que yo doy.
Tal vez el tiempo de mi cuerpo posea un reloj de arena,
un final sin más:
La esencia de la soledad no tiene ya tu nombre,
solo tu recuerdo.







Ningú m'espera ja amb l'ànsia de donar-me el mateix que jo done.
Tal vegada el temps del meu cos posseïsca un rellotge d'arena,
un final sense més:
L'essència de la solitud no té ja el teu nom,
només el teu record.





Traducción al valenciano y pinturas de Amparo Pinter





1 comentario:

  1. No te importe dar, aunque no recibas lo mismo, el final llega cuando no se tiene nada que dar.
    Este insomnio me pone demasiado profunda.
    Hasta otro día, besos.

    ResponderEliminar