y con los últimos meses caen con estrépito ante cualquier mirada.
Sigo sintiendo frío
y sé de la tristeza de la lluvia de principios de otoño.
Mi cuerpo sigue recordando estremecido tus labios,
y con el calor de tu boca tengo, todavía,
las pequeñas señales de tus uñas en mi espalda.
Rasgo los atardeceres como las hojas de un periódico leído,
hay en este café demasiadas cosas que tienen las huellas de tu paso
y sí, es cierto, es de los pocos sitios donde sirven un buen oporto.
Algo se me escapa, la vida suele plantearme incertidumbres,
pero no logro percibir
todo lo que un día de lluvia puede arrastrar con su silencio.
Hay un gran escaparate a la calle peatonal,
se dejan ver los primeros paraguas y afloran las gabardinas,
con ellas viene esa sensación tan particular
que acumulas hasta los alrededores del invierno,
donde todos somos un poco más introvertidos
y las ausencias calan y crean una pertinaz alarma en la piel.
F
Para Deneuve...mi amiga poeta con révolver...
Ya se presiente la melancolía del otoño en tu poema, a mí me gustan ambos.
ResponderEliminarUn bonito café para una bella historia... y ciudad.
Besos, Fernando.
Hoy he estado en mi torre de babel particular, cerca de la plaza san francisco... querido, no había gabardinas, pero si muchos abrigos... el amigo cierzo...
ResponderEliminarBesicos
El frío, los paraguas, las hojas de los árboles tapizando las calles...es una nueva estación que nos conduce sin más al frío invierno de días cortos y grises.
ResponderEliminarSaludos y sonrisas
a menudo tus versos son flechas, hoy la foto saeta, yo diana en este otoño distinto, ese café es para mí primavera en invierno.
ResponderEliminarPreparémonos para noviembre, Fernando. Hay que ir buscando cobijo en todo lo que amamos.
ResponderEliminarUn beso.
En efecto: ya llega noviembre. Tomaremos más oportos en ese café inigualable -y en otros muchos- y pasaremos el trago del otoño, de la navidad, de fin de año, de los reyes magosssss...Ufffffffffffff....
ResponderEliminarPreciosa es tu palabra abrigadora.
ResponderEliminarTe beso poeta querido.
M.
Vaya, ese sitio me suena...
ResponderEliminarAbrazos.
NOviembre se acerca y deja al sol entre las nubes de su momento.
ResponderEliminarUn abrazo, Fernando.
Ver la imagen del café me ha traido recuerdos, Fernando.
ResponderEliminarLo malo es que si llegan recuerdos es señal de que uno no está construyendo otros nuevos.
Un abrazo