jueves, 19 de noviembre de 2009

Después...







Después, sencillamente, sumo las denuncias

y me encuentro con mi alma vacía

sentada en la fría repisa de un alero.

Como un gato miro la noche,

la sensación del viento entrando por mi piel,

lo oscuro próximo a la nevada,

una suerte de palabras sucias

con que inundar noviembre,

y esa escasa luz que a estas horas

todavía guarda tu ventana.


6 comentarios:

  1. ¡Oh, Fernando! Eres aquí más gato que nunca. Y el poema, tiene algunas imágenes maravillosas, esa "suerte de palabras sucias".

    Un gran beso.

    ResponderEliminar
  2. Algo así como sentado sobre la cornisa...da vértigo.
    Saludos

    ResponderEliminar
  3. El mundo visto desde los ojos de gato desde un alero:
    noche, viento, oscuridad, otoño de palabras sucias...
    quizás la ventana distante nos dé la escasa luz con la que ver(nos).

    Abrazos.

    ResponderEliminar
  4. Como diría el bello Biolay, Fernando, contigo y con tus poemas "Noviembre es todo el año". Me gusta comoclavas los pies sobre la tierra y escribes y escribes para llenar tu cuerpo y que el frío viento de este mes no te derrumbe.

    Un abrazo súper súper.

    ResponderEliminar