ese instante nocturno de zumo de granadas y dolor en los labios.
Renuncié a tener el lado amable de tu cuerpo,
la algarabía de pájaros,
el silencio habitado de tus dedos buscándome.
Ahora amanece despacio,
cruza la ribera un hilo desnudo,
la platea donde el invierno se despereza
y el río se reserva estremecido un color brumoso,
la horda de susurros de un mundo dormido.
http://www.youtube.com/watch?v=hBDLQZgntYE
F
Para Victor Juan...él ya sabe por qué

Muy hermoso susurro.
ResponderEliminarHermoso blog... gracias
ResponderEliminarHermosa esa platea donde se despereza el invierno.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.