
Escuchó en el viento
los rasgos imposibles del invierno,
latentes, precisos, con la nívea esencia del frío.
Al amanecer hay ciertas huellas en los cristales,
ese paso dormido de la humedad por el tiempo y el silencio.
los rasgos imposibles del invierno,
latentes, precisos, con la nívea esencia del frío.
Al amanecer hay ciertas huellas en los cristales,
ese paso dormido de la humedad por el tiempo y el silencio.
F
Saber escuchar al viento es la cualidad del poeta. Abrazos.
ResponderEliminarCristales en los cristales.. que guardan la vida en su silencio.
ResponderEliminarMas saludos :)
ese sentir huraño del viento
ResponderEliminarese invierno que se recrudece de frío
y al amanecer... la vida de nuevo despierta
rastros, huellas... todo pasa desapercibido
pero tus versos recogen eso invisible, desconocido, olvidado...
¡hermosa cosecha!
besos Fernando