A veces en las cosas más simples encuentras un bálsamo, otras pueden parecer simples pero reúnen una cantidad de pequeños mecanismos que mueven la maquinaria interior de las personas y que hace que de algo como es una cena entre amigos y conocidos con algo en común que es celebrar la aparición de un libro escrito por uno de nosotros,( una persona entrañable y que siempre sabe estar en la mesura y en la alegría y con una palabra amable para cualquier momento... Miguel Serrano y su libro de relatos: Órbita)...para que se de como un pequeño milagro, la comunión, la algarabía, las buenas sensaciones y cuando menos lo esperábamos la aparición de Ángel Guinda que supo dar el color republicano al momento con recuerdos, canciones, bandera y poemas...a veces se te alegra el alma con los pequeños detalles de la vida.

Suena a momento inolvidable, para llevar grabado en el corazón.
ResponderEliminarUn abrazo.
Esos pequeños detalles son, precisamente, los que alegran el día, y la vida, me alegro que los encuentres y que sepas apreciarlos y disfrutarlos.
ResponderEliminarA mí me alegra el día leer cosas como estas.
Un fuerte abrazo, Fernando.
la cosa más simple es el regalo más dulce
ResponderEliminarbesazo
Fernando,visitando a Zarela te he descubierto.
ResponderEliminarComparto contigo tu forma de ver la vida, detenerte en cada cosa, parando el tiempo y disfrutando del momento como si fuera el último..
Me gusta tu cercanía y tu sencillez en la exposición.
Tu poesía es personal y entrañable.
Enhorabuena, te seguiré visitando.
Me agrego a tus seguidores.
Un abrazo.
es eso la vida, una sucesión de momentos pequeños, de sentimientos insignificantes...eso la hace grande.
ResponderEliminarBesos
Esos pequeños detalles, son los principales pilares....
ResponderEliminarun abrazo amigo. Marea@
Leo estas dos últimas reflexiones tuyas y creo que eres muy afortunado por saber expresar en todo momento qué sientes, en qué punto estás.
ResponderEliminarEstá bueno eso de ser un incendio.
Estoy pelín ausente, pero estoy.
Besos, muchos.
es verdad y más necio el que lo esconde...la verdadera belleza está en la simpleza así como su sabiduría:=)
ResponderEliminarsaludos
Fue un momento entrañable que tú, destilando palabras con cariño, has reflejado con la mejor sonrisa del alma.
ResponderEliminarMomentos llenos de vida, palabras... y buena gente, Fernando. Los mejores para el recuerdo y que vengan muchos más como esos... Salud!
ResponderEliminarBesos