
Hay días como hoy que me habita un húngaro, es difícil escribirte entonces, porque entre cuatro consonantes pongo otra con un acento circunflejo como si fuera un enigma egipcio, por eso en la noche me coloco al lado de tu cuerpo mientras duermes y en silencio te respiro como si fuera el vaho de tu boca, la parsimonia de tu sueño, el yodo oceánico y necesario que me conmina a seguir en tu cama, girando alrededor de tu piel como un hurón se asienta en la maleza, y en mi calmada búsqueda recorro los recovecos de tu alma sabiéndome unido a ti en este círculo rojo de vigilia y oscuridad solitaria.
Pues fíjate, que hoy me he levantado yo muy checo... ¿Seremos vecinos?
ResponderEliminarAbrazos.
Yo soplo para que tus sueños remonten el vuelo, y los de todos los que leen, ya que estamos
ResponderEliminarHúngaro...
ResponderEliminarYo me siento Bulgara ¿Qué hacemos?
Nos juntamos con el checo de arriba y nos tomamos unas birras.
M
Hay poemas que sólo pueden escribirse en los recovecos del alma que los inspira.
ResponderEliminarBesos.
Ese olor a vida que desprende la compañía...
ResponderEliminarBesos.
No tan solitaria Fernando... no tan solitaria. Hermoso poema y muy tierno. Me encanta.
ResponderEliminarBesos
¡Qué hermoso! El arte de decir lo que sientes. El arte de decirlo así.
ResponderEliminarLaura
Sólo concibo las vigilias
ResponderEliminarde clandestinidad y sacrificio.
Como lo más sagrado que puede encontrarse un ser humano.
Un (b)eso
Por una vez, casi es mejor que hagas todo lo demás, tampoco está mal, ya escribirás mañana.
ResponderEliminarUn beso.
Hay dias como hoy, en que me habita la soledad, me acaricia la mejilla y me presta su hombro...sera la misma sensaccion de sentirse hungaro??
ResponderEliminarUn besote mi querido Fer..
bellisimo poema , eso es amor...
ResponderEliminarbesitos entre instantes de ternura
Y en silencio te respiro.... Ni siquiera basta decir que es bello porque es mucho más que todo eso, Fer.
ResponderEliminarPor cierto, no te lo he dicho, me encantó ese breve encuentro.
Bonito y complicado a la vez, me sorprendes cada día. Un abrazo.
ResponderEliminarLo de húngaro es una buena excusa para disfrutarla en su totalidad. Abrazos.
ResponderEliminarYa ves, Fernando, a mí hoy me habita un duende. Enhorabuena, poeta.
ResponderEliminarUn abrazo.
Cuando nos habita ese mejor respirarnos.
ResponderEliminarUn beso
Alba
Me encantan todas las palabras del título. Y la idea.
ResponderEliminarMe ha parecido precioso.
Yo hoy he desayunado al lado de unos rumanos.
Me llevo algún poema de tus hormigas para leerlo esta noche en nuestra tertulia de poemas.
Besitos