
Cuando me ames
sométeme al paso de tu mano,
deshaz todos los tiempos,
para el mundo,
desnuda el cielo,
empápame de lluvia,
sé el eco y su lamento,
la luz de los faros,
el color de la caricia,
el zumbido de las abejas,
la caída de las hojas,
la brisa delatora,
el olor del océano,
el rojo incesante del desierto,
los muelles y su vértigo,
el último tren nocturno,
lo lóbrego y saciable.
Incendia el desván de las palabras,
hazme callar
escondido como un gato en tu regazo...
F
Bello!!! Mi alma se llena de placer al leerte!!! Besos llenos de luz!!!
ResponderEliminarYa salía de tu música, volví a entrar para decirte que me acabo de dar cuenta que no es Sarriá, es Sarría, y... ¡plaf!, el gatito.
ResponderEliminarMe gustan los gatos, es agradable acariciar su lomo.
Del poema no digo nada, temo repetirme.
¡Jo, con Sol!, debía tener el comentario en la recámara.
Más besos.
Madre!
ResponderEliminarQué belleza!
besos
Precioso.
ResponderEliminarcuando te ame hará eso y todo lo que quieras
ResponderEliminarun beso
Ya va a tener mérito hacerte callar.
ResponderEliminarBuena enumeración.
Beso s
Y mientras llega el amor, el gato maúlla y ronronea.
ResponderEliminarEl callar vendrá después.
Abrazos.
hermoso poema, no hay mas que decir, un saludo
ResponderEliminarCómo me ha gustado este poema, y ese ultimo tren nocturno.
ResponderEliminarBesos
Genial Fernando un poemas para los sentidos, me ha sorprendido la imagen escogida, me trae recuerdos muy gratos del mundo de mis sueños.
ResponderEliminarMe agrada mucho la idea de incendiar el desván de las palabras
Besos
¡Qué delicia! Un abrazo
ResponderEliminarLas palabras se tiñen de colores cuando el amor aflora escondido en un regazo amable. Abrazos
ResponderEliminarsiempre maravillosas tus palabras, fernando...
ResponderEliminarbesos de lluvia